GOD SAVE THE QUEEN
No
sabe con quién se ha metido, pobrecita, posiblemente no está enterada de que Correa
ha decidido que la soberanía del Ecuador
está sobre la del Reino Unido, cuya Corte Suprema ha osado
contrariarlo decidiendo la extradición de su amigo Julian el hacker.
Su
alteza se expone a que Correa , indignado, degradándola a Chabelita, con ayuda de los del Alba, Siria e
Irán, le arrebaten en plaza pública su corona y exija que la ONU y OEA impongan en reemplazo de la monarquía un gobierno
democrático a la tercermundista usanza del insultador sabatino.
El
reino Unido en franca provocación se ha atrevido a declarar que cumplirán con
lo dispuesto por su Corte Suprema y para tal fin, asegurando que el derecho a asilo es uno de esos términos
"no absolutos" de la
Convención de Viena, una opción podría ser suspender el reconocimiento de la embajada. ¿Acaso
están buscando que Correa reforme e interprete a su antojo la aludida Convención y además meta la mano en la justicia europea como tuvo
que hacerlo por estos lares?
De
haber solicitado asesoría diplomática a un país amigo y del primer mundo, nos hubiera recomendado
ahondar con Londres en su motivación de
los términos no absolutos del derecho de asilo
al que se refiere, eso, en vez de
saltar histriónicamente gritándole al mundo que el imperio van a atacar la
embajada, pretendiendo conseguir
respaldo demagógico y consiguiendo a cambio bochornosa figuración. Y nos hubiera reprochado
la concesión del asilo materia de nuestra actual y vergonzosa distracción.
No
se ha iniciado, que yo sepa, procedimiento judicial en
U.S.A. en contra de Julian el
hacker, a pesar que un hacker es, por definición, un delincuente informático
porque roba información privada y violenta el derecho humano de proteger la correspondencia de injerencias arbitrarias, como lo establece el
artículo 12 de la Declaración Universal
En
el 14 de la misma declaración se condiciona el pedido de asilo a que haya
persecución pero expresamente prohíbe su invocación contra una acción judicial
originada por delitos comunes, que es el caso. Más claro, Correa ha otorgado asilo fuera de
los términos requeridos para hacerlo, politizando soezmente un derecho con el que no se juega.
En
su falta de ignorancia el Reino no comprende que Correa no necesita prueba
alguna de la supuesta persecución para determinar por si y ante si que
las cortes suecas no son confiables y que Suecia, de taquito, se lo envía a
Estados Unidos, pero a un Estado de la Unión donde exista pena de
muerte porque el imperialismo yanquí, lo va a matar. Si Él lo dice, así es.
Y,
por favor, que no pretenda la diplomacia del Reino Unido estar a la altura de la ecuatoriana, así que
mejor es que se ubique solita antes que Ricardo, vía valija, la ponga en su
puesto.
Jaime
Vernaza Trujillo.
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